miércoles, 30 de mayo de 2012


La Cinta de Möbius

No es karma, solo causa y efectoJuan Carlos Navarro



<<La Causa>>

     Desde hacía algunos años, Jacob, tenía esa sensación de transitar por la vida sin sentido alguno, siempre pasando por los mismos lugares recurrentemente, todos los días, planos de fondos repetitivos como en las viejas caricaturas de Hanna-Barbera eran los paisajes de su día a día. Sentía caminar de forma cíclica, siempre llegando  al mismo lugar desde donde partió, al origen de esa andanza de extrañeza repetitiva.

      Rutinariamente…  Suena el teléfono con la alarma recalcitrante, esa que programas con conciencia de despertar temprano y que cada mañana detestas más por ser excesivamente escandalosa, al grado de querer hacer añicos el teléfono; “pppprrrrrraaatt, pppprrrrrraaatt, pppprrrrrraaatt” <<onomatopeya difícil de replicar>> 6:30 a.m. se levanta Jacob, amodorrado, el bien dormir no era lo de él, alma noctambula e insomne, vestigios de babeo en la reconfortante almohada y en la comisura izquierda de su boca, barba de 3 días de truncos bellos rasposos sobre la cara, la cabeza que ya teñía de muchos destellos plateados, totalmente descuidada y de largos mechones, lagañas en los ojos, el aliento pesado que normalmente es consecuencia de las horas de sueño, andar de pies arrastrados…

     Se observa en el espejo, que extrañamente se encontraba, no sobre el lavamanos como convencionalmente se hace, sino al costado derecho de este, sobre la ventana que le da ventilación a ese extraño baño, toma el cepillo de pequeña cabeza y de cerdas tan suaves como caricias para las encías que era un ritual gozoso el  lavarse los dientes con él, un trago de enjuaga bucal y aliento fresco, se baña, se toma su tiempo y sale al trabajo.

       La caminata hacia el trabajo le llevaba 10 minutos, y… es que Jacob era un tipo totalmente rutinario y cabalístico, caminaba siempre por las mismas calles pensando que esas rutas eran las benefactoras de que su día fuese el ideal, si por algún motivo se tenía que desviar de la ruta trazada, refunfuñaba contra sí mismo, un tipo totalmente predecible.

       Demasiado programado, no improvisaba, se movía de acuerdo a un plan el trazado, también cabe decir que los beneficios de dicha programación le permitían tener cierta disciplina para realizar las cosas que llenaban las horas de ocupación de su vida ordinaria, aparte del trabajo matutino, por las noches ya cansado pero casi religiosamente, tomaba el pesado y complejo libro de Topología Algebraica… era un estudioso empedernido, disfrutaba mucho del llenar su cabeza de formulas matemáticas, eso le permitía tener una mente muy programada… y ahí de repente se topa con el tema de homeomorfismos, nudos, enlaces, invariantes y el numero de Euler… la Cinta de Möbius.

       Leía y leía pero no comprendía de lo que se trataba y es que la cinta de Möbius es una forma de simpleza extrañamente hermosa pero sumamente compleja, a pesar de ser una forma anillada solo tiene una cara, no es orientable y si decidieras caminar sobre la cinta de Möbius, te encontrarías con la gran sorpresa de que nunca llegas a ningún lado o mejor dicho siempre llegas al mismo lugar donde iniciaste la caminata.

      Un contundente golpe analógico fue asestado a la cabeza de cabellera cana de Jacob, y es que él desde hace algunos años había estado atrapado, caminando sobre la cinta de Möbius, sin ir a ningún lado, como inicialmente describí, aun así, de comprender la analogía que dicho precepto matemático le brindaba a su vida, el no hizo nada por remediarlo… ¿Por qué?

     Porque era muy cómodo y seguro caminar siempre por los mismos caminos, era muy seguro tratar a la misma gente por el hecho de ya conocer la forma en que se comportan, era muy cómodo vivir sin ningún reto ante la vida, incluso era muy cómodo porque nunca tenía que caminar mas cuadras de la casa al trabajo y viceversa… no existían retos, ni inseguridades…

        Cierto día, como cualquier otro en su vida… Rutinariamente religiosos: suena la recalcitrante alarma, baba en la almohada y en la comisura de la boca, arrastra los pies al baño, goza de la limpieza bucal matutina, se enjuaga, se baña y se dispone a caminara como siempre al trabajo.

         De inicio todo normal… camina la primera cuadra y al doblar la primera esquina…

       ¡Tumulto!..., ambulancias, policías perimetrando con cinta de advertencia la calle, chismosos parados obstruyendo tanto la circulación de la gente como la de los vehículos, personas comentando y gritando otros más se preguntaban ¿Cómo ha sucedido?... Jacob, sentía que se moría, era la calle que comúnmente transitaba para ir al trabajo… y ¡hay de él si no lo hacía!... trágica y apesadumbrada situación, la presente para Jacob.

      Furibundo se acerca a un policía y con reclamo fuerte le dice…

-¿Qué demonios pasa acá?, ¡necesito pasar para ir a mi trabajo!...

-Imposible señor, ha ocurrido un accidente trágico y demasiado brutal y no puede pasar nadie, absolutamente nadie.

    Un calor abrumarte recorre la espalda de Jacob, indecisión, traumas, miedo, histeria total… no sabe qué hacer y de los 10 minutos cronometrados que siempre se tomaba para llegar a su trabajo ya habían pasado 6… se dice en voz introspectiva… ¡Debo actuar ya!

     Media vuelta, regresa por donde vino, llega a la primera esquina de la cuadra en donde doblo y se queda indeciso entre: ¿regresar a casa o tomar otro camino?... cobardía espiritual… un impulso lo hace dar el primer paso y toma el camino perpendicular por el cual regresaba del accidente… contrariado y chocando con todos los transeúntes de esa calle, pisotones en los lustrosos zapatos, se le desata una cinta y el no se da cuenta… avanza… alguien que caminaba tras él con premura por llegar pronto al trabajo porque ya era tarde lo flanquea por la izquierda y pisa la cinta del zapato desatado, a su vez el pretende dar el paso y se va de bruces, totalmente de boca sobre la cera sucia… papeles regados por todos lados, la gente inconsciente los pisa el totalmente apenado se hinca, los recoge y piensa…

      Con espíritu quejumbroso y de total abatimiento, casi al borde de las lágrimas por un coraje sin sentido… ¡ME LLEVA EL CARAJO!... ¿Por qué tuve que caminar por acá?... aun yacía hincado y cabizbajo, mientras la gente sorteaba la penosa humanidad que estorbaba el camino… de repente…

        Una mano aparece de la nada, se la brindan y el con mirada de sorpresa alza la vista y observa esa linda cara… de vos dulce y encantadora… estupefacta mirada la de Jacob, impresionado toma la estética mano y se levanta con la fuerza que proviene de ella…

    Ella con voz dulce le dice ¿Qué pasa, por que tan sorprendido?... Totalmente mudo el tipo canoso…

      Ella vuelve a preguntar, ¿No le paso nada?, vi que se cayó y nadie le brindaba una mano para levantarse,  - venga pase, yo trabajo acá enfrente, lávese, amarre su agujeta y tómese una taza de café…

       Casi en estado de hipnosis Jacob la siguió, mientras por su cabeza había ocurrido un gran cambio, toda las quejas, se habían transformado cuestionamientos de fortuna, todo lo malo, ahora tenía el dulce sabor, todo era gratitud por haber tomado el nuevo camino…

        Se lava la cara, se ata los cordones y acepta la taza de café…    


<<El efecto>>

     Sería grato para mi concluir esta historia con un dulce final, aunque de cualquier modo si hay un final un tanto grato para Jacob, el encontró una nueva cinta de Möbius en la cual transitar, dejo la anterior, por la nueva la cual le permitía pasar siempre por el lugar donde trabajaba la chica de voz hermosa y manos suaves, de la cual nunca tuvo el valor de preguntar su nombre…¡Que importaba caminar ahora 20 minutos¡… ¡Que importaba ahora levantarse con esa maldita alarma más temprano¡… ahora todo tenía un nuevo sentido, un nuevo sabor…

    Caminar las cintas de Möbius, para él son cuestiones difíciles de dejar, solo que ahora lo hace persiguiendo un fin que quizá algún día llegue a alcanzar.

@giancarlonavesc

miércoles, 23 de mayo de 2012


El Final del Mundo

No es karma, solo causa y efectoJuan Carlos Navarro


<<La Causa>>

     Una mañana fría la de ese día, yo como un en una jornada habitual, desperté muy temprano. No podré negar que al igual que todos tenía un miedo argumentado, durante los últimos meses, los noticiarios, nos recordaban del inminente final, las iglesias y religiones nos daban la oportunidad del arrepentimiento y el alcanzar la salvación si optábamos por una u otra creencia, la gente totalmente desquiciada, compras de pánico, estado de sitio, gente peleando con violencia desmedida y sangrienta por la poca comida que quedaban en los anaqueles de las tiendas, calles silenciosas, un entorno enrarecido, ventanas tapiadas, miradas de desconfianza… incluso en este pueblo en el que aún vivo, pueblo de creencias arraigadas, sumamente devoto y de idiosincrasias difícil de derrocar, habían colocado una sirena en lo alto de un asta al centro del parque, debajo de ella una bocina y con una leyenda al pie sobre un tablón viejo que alguien pinto con caligrafía trémula, con pintura negra que escurría  y que decía: …

     “ALARMA DEL FIN DEL MUNDO: ¡Arrepentíos Pecadores!, pueblo entregado a lo carnal y mundano, cuando escuchéis y veas esta sirena encenderse, el final es INMINETNTE, arrepentíos y no claudicaras… De lo contrarió un CONDENADO MAS SEREÍS

     Una combinación de sensaciones era lo que transmitía el anuncio holocaustico y ¿cómo no?, leyenda amenazante, letras negras escurridizas, caligrafía temblorosa, Miedo era lo que transmitía. Para los pocos que transitaron alguna vez en ese parque de hermosura especial era inaudito verlo así, colmado de basura, muerto, de bancas rotas, de fogatas en tambos llenos de llantas y basura ardiendo, de perros carroñeros buscando alimentarse desesperadamente en jaurías violentas, daban un entorno tétrico junto con el cartel trémulo… <<Por la manera de ser redactado apuesto fue el sacerdote de la iglesia frente al parque, el autor>>

     Como inicialmente dije, esa era una mañana muy fría, desperté a las  6:23 a.m. sintonizo la radio desde el teléfono celular, veo la pantalla del mismo, la cual tiene una hermosa fotografía de ella, observo lo siguiente: viernes 21 de diciembre de 2012, 6:23 a.m.  Sorprendido digo: ¡Hoy es el día!...

     Mientras escribía el acostumbrado mensaje de texto que día con día le mandaba a mi amada, escucho atentamente por la radio del teléfono que yacía en mi mamo, detengo mi escritura y escucho… “Mensaje oficial”  y  empieza el comunicado, eran las 7:00 a.m. <<la voz de acento peculiar del presidente de la nueva republica amorosa al habla, decía:>> “Queridos compañeros, hoy es el día pactado, según la creencia y las teorías hoy es un día culminante en la historia de la humanidad, hoy aparentemente el mundo llega a su final, coincidente con el solsticio de invierno hoy 21 de diciembre de 2012 a las 11:12 hrs […] Los invito a no perder la calma, serenidad, afrontemos juntos esta nueva contrariedad “Si pudimos contra el sistema y el priismo ¿Por qué no poder contra esto?...

     <<En desesperación, generalmente el consciente traiciona al subconsciente, las ordenes o peticiones son tergiversadas>>  Parece que la petición de mantener la calma y la serenidad, fue entendida en otro contexto, en el contrario, y… ¿Qué se puede hacer sucumbido por el pánico?...

     Inicia, el verdadero fin del mundo…

     ¡ALERTA!... Suena la sirena, estridente, chillante, ensordecedora, por la bocina se escucha al sacerdote hablar, en tonos de temerosa excitación, conmovido por el lúgubre panorama… “ES TIEMPO, ARREPENTIOS, NADA MÁS HAY QUE HACER QUE ENTREGAR NUESTRAS ALMAS A LA IGLESIA Y EL SEÑOR […] BLA, BLA, BLA” <<El miedo era el que hacía hablar a aquel sacerdote, muy estereotipado, es imaginable>>

     Hordas de gente, se agolpan hacia las calles, pánico, tumulto, golpes, niños llorando, abuelas rezando… la iglesia era insuficiente para agrupar a toda aquella gente, muchos afuera, muchos tantos más apretujados dentro… Pocos nos quedamos rezagados, no por ser valientes, sino más bien por estar resignados al fatídico destino (si es que lo había) a parte: ¿Cómo salvar una fruta podrida?, yo estaba condenado desde hacía tiempo, nada ni el poder divino al cual, AHORA respeto de una forma especial pero expectante, me podía salvar…

     Salgo a la calle y me topo con Raúl, un muy buen amigo, uno de los pocos desde que llegue a este pueblo muy símil de creencias a mí y le digo:

  -           ¡Raúl, cabrón, ¿A dónde vas?!... ¡A la iglesia verdad!... ¿Te arrepentirás? <<le grite incrédulo>>...

-          No cabrón… Voy a buscar un par… no… muchas, las que pueda… voy a buscar Vodka. Botellas y botellas de Vodka, cigarrillos, cervezas, etc… todo para hacer de esto digno… Salvador, no me puedes dejar solo… ¡ESTO HAY QUE CELEBRARLO, A MANDAR A LA MIERDA AL MUNDO CON ESTILO!

    -          Pero… este... fíjate que yo… ¡Bueno, VAMOS!

     Llegamos a punto de empujones, las pocas Vinateras estaban abarrotadas de gente, ya no comprando sino llevando a manos llenas el alcohol, los dueños de estos lugares ya no vendían, regalaban a la voz de “acábenselo todo, llévenlo, nada seremos mañana”.

     Logre sacar tres botellas de Vodka, una de whisky, la cual en el tumulto se me cayó al suelo y se hizo pedazos y cuatro cervezas frías las cuales distribuí dos en las bolsas delanteras de mi flojo pantalón y las otras dos al reverso del mismo.

     Raúl, como siempre más acomedido llevo una gran maleta de viaje, saco tanto pudo, no contabilice, pero era mucho alcohol, frituras, cacahuates, cigarrillos, etc... Y me dice con una risa traviesa y de excitación…

-          ¡Vamos al Parque, que ahí será la Fiesta del Fin del Mundo!

     Camino hacia el parque… Mucha gente ya había iniciado la fiesta… el señor de la Farmacia ya un tanto beodo y con su gran nariz roja, regalaba medicamento a la gente… los prestamistas salían a tirar el dinero a las banquetas, el mismo que pasaba desapercibido, pisoteado bajo los pies de la gente que buscaba comida, alcohol o diversión… gente regalando ropa, risas en algunos, preocupación en los demás y llegamos al parque…

     La gente fuera de la iglesia resignada a no poder entrar se acercaba a los micro-grupos que escuchaban música, reían y bebían alcohol, y al igual que ellos se divertían, se conocían, se abrazaban, algunos se besaban, otros más comenzaban a sacar del “closet” los vestigios guardados de la sexualidad reprimida… Todo era tan natural, tan cómo debe de ser, sin tapujos, sin clases sociales, sin desigualdades étnicas ni religiosas… claro… el Alcohol desinhibe hasta al más reacio de carácter… ¿cómo no?... si puede aflojar el cuero de los zapatos cuando nos aprietan, ¿Qué no doblegue un alma empedernida?

     Cada vez más, estos micro- grupos se hacían más y más estrechos, se comenzaba a formar un colectivo muy especial, reían, se abrazaban, todos entonaban en coro, diversas canciones, desde las rancheras, hasta el pop, o el rock… ya nadie se guardaba nada, todos sacaban esos sentimientos reprimidos por ellos mismos, por la misma sociedad. El sacerdote irrumpe la fiesta con gritos desde su altoparlante, “SEÑORES ARREPENTIOS”… varias personas lo vas a agarrar y lo hacen participe de esta fiesta, el sacerdote reacio y amenazado por el tumulto se bebe varios tragos de tequila y al igual que el colectivo empieza a disfrutar de esta fiesta… los únicos que no encajaban en ella, eran algunos “politiquillos chic” que miraban desde los balcones de sus ostentosas casas, la fiesta proletaria, no pertenecían a ella… en fin… estaba cerca el final pactado… 11:00 hrs

     En eso se nos une Inez, mi amada, la abrazo fuertemente, le digo cuanto la amo y abrazados esperamos expectantes el final… 11:10… quedan solo 2 minutos… aún algunos cantan pero los demás estamos expectantes, miedo y muchos sentimientos encontrados… 11:11 un silencio de golpe se deja sentir…el gran reloj de la iglesia marca las 11:12 hrs del 21 de diciembre de 2012… ¡Un suspiro de angustia generalizado!...  

      …

     Y el reloj marcó las 11:13, ¡alivio! Un ¡AHHHHHH! Sobrecogedor se deja sentir en coro… una voz solitaria dentro de ese gran colectivo incontable se deja escuchar a grito descarado… ¡SOBREVIVIMOS AL FIN DEL MUNDO!...

<<El efecto>>

     Ambiguamente habíamos sobrevivido al final del mundo, pero en realidad el mundo acabo, ese mundo de ambición, de valores retorcidos, de gente vacía de espíritu, de políticos corruptos, de sacerdotes pederastas, de conveniencias malsanas, de monopolios televisivos, un mundo de inconsciencia en muchos aspectos, inconsciencia ecológica, moral y de valores… ¡Sí! el mundo acabo y para bien… para darle paso a un nuevo mundo, de unidad, casi utópico, de perfección anhelada, de valores no materiales sino espirituales… un mejor mundo…

     No fue un meteorito, ni inundación, ni catástrofe, fue la conciencia humana, un poco de alcohol y  los valores que generalmente extraviamos por preocuparnos por cosas irrelevantes la que nos ayudo a darle final al retorcido mundo en el que viviamos.

@giancarlonavesc

miércoles, 16 de mayo de 2012


Quisiera Decirte… ¡Gracias!        

No es karma, solo causa y efectoJuan Carlos Navarro


<<La Causa>>

          No te puedo, mentir… me da mucho miedo iniciar este dialogo contigo.


        Escudándome tras historias fantasiosas, que a pesar de tener esas dosis de ficción, siempre hablan en sentidos figurativos de nuestra vida. Y… es que no puedo hacer uso de ese lenguaje prosaico que utilizo en nuestros textos, contigo es diferente, más real, a pesar de estar hablándole al pasado que nos ha aperturado el camino que hoy transitamos.


          La carita, llena de confusión pero de inocencia infantil, el olor a talco, a los jabones, a aquellos pasillos de esa vieja vecindad que nos miro crecer, las tardes del café con los abuelos, de los abrazos prolongados de las tías, de los afectos de los padres que por trabajar para darnos un futuro promisorio eran limitados a ciertos instantes y que no por ser breves carecían de calidad y emotividad fulminante, de los paseos por aquel viejo parque, que ya mas no existe.


        Quisiera darte un beso en esa pequeña frente, pulcra y de rizos vírgenes, quisiera darte un abrazo sincero, cálido y fuerte, quisiera compartirte todo esto que me colma de un sin número de sentimientos, quisiera agarrar esa pequeña mano, estrecharla entre la mía, quiero saber como éramos,… Solo Quisiera.


          Contarte lo que ha sido de nosotros,… Decirte todo, sería injusto… pero Juan… Solo Quisiera contártelo para que sepas que a pesar de en algún momento haber creído que errábamos el camino, ahora, promisoriamente, nos dirigimos hacía algún lado, no sé exactamente hacia donde,  pero, he encontrado el - ¡¿Por qué? de nuestro andar!... me gustaría que lo sepas, ya que solo tú me comprenderías… agradecerte es lo único que busco… Quisiera


            Entender como a pesar de compartir un mismo cuerpo, que ahora ya está más viejo y curtido por las vivencias, dos seres que en algún momento discreparán, se reencuentran después de tantos años, ahora me siento como en aquellos días, con alegría infantil, con la incertidumbre contradictoria, de que existe un futuro para nosotros, pero el cual aún desconocemos, un futuro que iremos descubriendo al caminar por este sendero nuevo… Solo Quisiera
   

             Gritarte, en cuanto tú llegues al punto donde creímos haber perdido el rumbo, ¡No te sientas derrotado!, hay más allá, créeme… “ninguna, ni la nuestra ha sido una vida mala, los tumbos y vicisitudes llegan a formar carácter, personas más sensibles y abiertas a las posibilidades que nos trae el día a día”… Dice Juan Antonio Rivera “La rama nunca entenderá el sentido del árbol”… Caminar… solo eso debemos hacer y sobre la caminata ser perceptivos y aprender… llegamos a constantes encrucijadas en nuestro camino, nunca te arrepientas del sendero que elijas, ten por seguro que te traerá hasta este punto, en donde yo te escribo este texto y en donde tu se lo escribirás al Juan que te mira con ternura desde esa foto; Porque al igual que yo sentirás la necesidad de agradecerle, por ser como fue: el  niño tímido, el que prefería en esas tardes de lluvia pedirle hojas blancas y colores a mamá para quedarse dibujando en la mesa de la abuela figuras geométricas de textos que no comprendía a salir a jugar con los demás niños, el niño incomprensible, que lloraba por cosas raras, al que le costaba hacer amigos por ser extraño de pensamiento, el niño que disfrutaba hojeando los libros de arqueológica… El niño que somos ahora… Quisiera


          Contarte de la gente que he conocido, de el aprendizaje que he adquirido de ellos, de creer que existe, la amistad y los afectos sinceros y de que también existen los mal intencionados, quisiera contarte, de ellos, de cada uno de ellos, porque también de ellos proviene esto, gente de sinceridad que reconforta, de los abrazos, las palabras y los besos afectuosos, de los apretones de mano que dicen más que la vigorosa fuerza con la que se dan, de ellos, los amigos, las personas que nos han formado… Solo Quisiera


             Contarte de Ella, que por ser de timidez extrema, aún no quiere que mencione su nombre, pero a la cual debo haber despertado de este letargo, de Ella , la que me provoca, la que me incita, la que me inspira y sobre todo la que me brinda su mano para caminar por senderos creativos inexplorados. De ella, la mujer que me complementa, de la cual estoy enamorado, de la que me felicita cuando aserto, pero que me corrige cuando vuelvo a perder el camino, de la que me brinda siempre un oído atento y sincero, de Ella, la que me da las palabras que necesito, cuando las necesito. De ella… Él ¿Por que? de nuestra nueva andanza… Quisiera

         Hablarte de mis planes, de lo que pienso, de la expectativa, pero recuerda que una expectativa solo es eso… y ante la expectación solo queda la acción convencida y con sentido de causa… combatividad, es de lo que nunca debes carecer, batalla, pelea, jamás te rindas, levanta la cara, ten seguridad… Esas herramientas nos vuelven seres más completos… No pienses que hemos cambiado en una persona afable y de perfección absoluta, nunca ¿Quién lo es?... tenemos arraigadas nuestras pequeñas idiosincrasias casi como tatuajes genómicos… aun así son batallas que peleamos, pero que al final de cuentas, esa idiosincrasias y defectos nos vuelven en los seres únicos e irrepetibles en este hermoso juego… Sé que eres un niño, que ya es tarde para ti, quizá ahora ya estés durmiendo, solo te pido que llegado el momento no dejes de escribir este texto, y ese favor le debes pedir al Juan que viene atrás… Esta vida es simplemente Hermosa, no la cambiemos, en realidad,  yo  solo perdí los miedos porque…


             Quisiera Decirte… ¡Gracias!


<<El efecto>>


 desde muy pequeño asumí con los dientes apretados esa condición que me dividía de mis amigos y a la vez atraía hacia el raro, el diferente, el que metía el dedo en el ventilador. no estaba privado de felicidad: la única condición era coincidir de a ratos (…) con otro que tampoco calzara de lleno en su matrícula, y desde luego no era fácil; pero pronto descubrí los gatos, en lo que podía imaginar mi propia condición, y los libros donde la encontraba de lleno 

Julio Cortázar - La vuelta al día en ochenta mundos, Tomo I.

@giancarlonavesc

miércoles, 9 de mayo de 2012


Sin Decir Adiós…            

No es karma, solo causa y efectoJuan Carlos Navarro



<<La Causa>>

     La verdad es que yo aún lo extraño, lo amo, y lo seguiré amando <<parecen ser ridículas palabras en un Hombre Maduro>>… El expresar libremente los sentimientos no era lo mío; siempre viví en esta zona pobre de mercaderes ladinos al sur de Moscú, un lugar ajetreado, mil cosas suelen suceder ahí, por lo tanto el espíritu se aliena en un ser de sensibilidad gélida. Pero el conocerlo fue una revelación, salvación y sentido a la perturbada y desubicada vida.

        El Circo de los Gatos… Aun recuerdo la estampa de arrogancia en el, era hermoso, el pelaje sedoso, cola esponjada, ojos redondos, como una estampa monocromo, en blanco y negro; la verdad es que los gatos llenan ese vacío que continuamente agolpa mi vida, endorfínica sensación la de combinar el tacto sobre el pelaje gatuno y sentir el ronroneo sobre el pecho, ese era el…  -Mirri

      A pesar de su enclaustrada vida, el tuvo el don y la gentileza, de liberarme de los grilletes que me lastraban el paso y que me hacían sentir un ser apático e inútil en esta sociedad de prejuiciosos valores… -¿no se?... creo que de haber sido un gato doméstico, hubiese muerto de infelicidad, rodeado de comodidades y una vida sin retos, ni metas… pero cuando yo lo conocí era el pianista principal de la orquesta del circo de los gatos de Moscú…

        Tenía talento  a desbordar, lo ponían a leer los métodos de rítmicas y solfeo, <<seguro de algún contrabajista>> frente al público, el cual, al igual que yo, quedaba por demás impresionado  y con sorpresa lúdica, era inevitable, escuchar las risas y las expresiones de sorpresa… era respeto, verlo tocar el piano con sus pequeñas garras blancas que simulaban un par de guantes de seda, golpeteaba con enternecedor ritmo las teclas de un lustroso pianito de cola, era simplemente sobrecogedor, de emoción indescriptible… ¡No pude evitarlo, y tenía que ir a acariciarlo¡

       Su amaestrador sale al paso, con celos fundados y me dice: - ¿Qué desea señor?

-¿Puedo acariciar a su gato?

    - ¿A Mirri?... claro por 5 rublos…

          Mirada que enamora, de candidez, y pasión animal, felina totalmente, se ponía de puntas de garra cuando mis caricias llegaban cerca de su cola; le pregunto a Oleg, el Amaestrador mientras mis pánicos se diluían con las caricias que le daba yo al pianista… ¿Cómo es posible que un animal tan hermoso, un gato, aprenda a hacer eso de simular tocar el piano y leer partituras?... debería ser domestico y vivir para ser consentido ¿no cree?

         <<Sabiduría que Espanta>>… ¿Sabe Señor?... Generalmente las comodidades, cuando no se manejan correctamente degeneran en apatía… A pesar de que no todos creen esto que le contaré: Mis gatos viven en comodidades más que las propias y ¿Cómo no?, si son los que ponen el pan sobre la mesa, siempre entrenamos arduamente con ellos para el espectáculo, casi sin castigo físico, pero si con condicionamientos… eso hace que mis gatos me respeten, vivan una vida activa y con un sentido, el sentido de brindar un espectáculo.

         Cierto es que: La capacidad del trabajo no es todo, ni razón suficiente y necesaria para infundir sentido a la vida de un hombre, más aún en los animales. A veces nos automatizamos en vivir una vida amplia y estrictamente productiva, trabajamos con la única idea de llegar a descansar por las noches, y levantarnos temprano, luego vivimos lo que llaman “la neurosis dominical”, nos divertimos, consumimos, a veces en exceso y descuidamos un aspecto importante y complementario de nuestras vidas –Lo Espiritual… quedándonos una sensación de desolación por volver al trabajo al día siguiente.

               En estos casos generalmente renunciamos a la capacidad de goce en favor a la capacidad de trabajar y viceversa, lo que me trae a colación lo que alguna vez leí en una novela “El trabajo sin amor es solamente un sustitutivo; el amor sin trabajo, un opio”

             Amor, no estrictamente del que se siente por una persona, aunque también es de suma importancia y lo único; a veces son cosas simples y proyectos de vida los que nos ayudan a encontrar el sentido a este andar y esa es la forma de complementar y sobre todo equilibrar el sustitutivo, con el opio… de verdad que eso es subjetivo, cada quién encuentra el sentido en cosas hasta, si se quiere ridículas, pero eso nos hacina a una vida con sentido.

         -<<Revelador>> Sin querer había encontrado ese subjetivo opio que ayudaba a hacer de mis días de apesadumbrado trabajo, en días de esperanza y alegría… cada noche que se podía iba al Circo de Los Gatos de Moscú a ver a Mirri, el pianista, el opio ecléctico de mi vida… <<hasta ahí la vida tenía un sabor nuevo, casi de dulces y tenues gustos a felicidad, sabores que no probaba desde la niñez y que por ser de sinestesica memoria, los disfrutaba habido de cada momento, casi con desesperación porque no sabía hasta cuando durarían>> … hasta que decidí (¿no se? si, mal o bien), ofertar una suma económica fuerte para comprar al gato pianista.

Platica entre Gatos

          <<En una mente sin temores, todo es posible>> Uno de esos tantos días de éxito del espectáculo gatuno, en el “backstage” Mirri el Pianista, platicaba con Thelma, una linda gata de pelaje pardo y le decía: –Fue un tremendo show, ¡Lo sé! y a pesar de eso me siento, incompleto, vacio, carente de motivos para vivir plenamente… ¿sabes que me gustaría ser?... Un gato músico callejero, trasnochando tocando con las bandas callejeras nocturnas temas de jazz, bajo las lunas de octubre que alumbran los basureros de los callejones pobres de Moscú… esa sería una vida plena para mí, no quiero ser más el gato pianista amodorrado y con aires de presunción que tanto deleita a la gente… quiero ser un músico jazzista callejero… pero…

        Le debo, a tanta gente lo que soy, que siento que defraudaré confianzas y cariños de todas estas personas que me han brindado, amistad, compañía, respeto, amor y una vida bastante cómoda, no es justo, ¡Estoy estancado en esta vida!... no puedo defraudarlos, ni a Oleg el amo, ni a Olga, su esposa que me acaricia y me peina todas las noches, ni a Iván el trapecista con el que he encarnado una amistad entrañable y menos a ti Thelma querida, a la cual amo con todas mis fuerzas…  <<Thelma, responde con convicción, pero con el corazón hecho trizas>>

        -Te quiero pedir un gran favor querido Mirri… Cuando decidas ser feliz, no te despidas, márchate Sin decir Adiós… sé que me amas, y yo te correspondo, sé que Iván es un gran amigo para ti, se lo mucho que quieres a Oleg y Olga, pero por ningún motivo podemos impedir que te frustres y seas infeliz… Nada nos debes, te apoyamos porque creemos que vale la pena pelear y fomentar la vida y el talento de un Gato que se lo merece… no sería un buen amigo el que aprovechándose de los beneficios de su ayuda te pida que te quedes… de mi parte no me debes nada, lo único que me quedará es la gran fortuna de haber compartido en algún momento nuestras vidas… Será doloroso pero, justo, la justicia tiene esa cara inmutable de acomodo divino… y si alguna vez nuestros caminos, se vuelven a juntar, seré feliz… mientras tanto recuerda… Cuando decidas ser feliz, no te despidas, márchate Sin decir Adiós…


<<El efecto>>

        Era miércoles, Tenía 5,680 Rublos para comprar al gato pianista <<suma ridícula para comprar un gato>>… Llego al circo, veo el espectáculo; premonitoriamente, fue un show memorable, Mirri estuvo impresionante, La señora que estaba a mi lado, estaba casi llorando por la emoción que aquel gato le causaba al tocar aquel pianito de cola, yo estaba más que complacido, pronto compartiría mi vacía vida, pero ahora con sentido efímero, con el gato pianista…

            Termina el Espectáculo… ¡El público aplaudía!, risas, personas de pie, niños gritando, gente elegante fumaba sus cigarrillos extasiadas por el show… Complacencia total… Los gatos hacen caravana y se cierra el telón…

           Me abalanzo hacía Oleg y le propongo sin más mi descabellada oferta, -¡Te ofrezco 5,680 Rublos por Mirri!... Nunca Olvidare el rostro de aquel gato de mirada inteligente, pero de tristeza que contagia, eso, aún ahora que lo relato y escribo me llena las cuencas de los ojos de lagrimas… <<es inevitable>>…

         Oleg me responde consternado -¿Qué le pasa, no sabe que…?... Ni bien había terminado la frase salir de su boca, cuando Mirri, con esa agilidad felina salta desde su pedestal, brinca sobre el pequeño piano, se escabulle bajo el telón y en la salida de emergencia de aquel viejo teatro que tenia la puerta casi a punto de caer, desaparece…

         Se marcho, decidió ser feliz, solo tuvo la cortesía de hacerlo cumpliendo con la petición que le había hecho Thelma… Se fue Sin decir Adiós. Muchos lamentamos su partida, con llantos, pero con la alegría de que supero sus miedos, decidió encarar, sin importar lo que la vida le trajera, sin importar lo que dejaba atrás, sin complejos de lo que pudieran pensar las amistades y los amores que había dejado a su paso… rompió esa barrera que a muchos nos cuesta y que posiblemente nunca romperemos… venció el medio a ser feliz… y lo es…

     ¿Cómo lo sé?... A veces, de noche, abro la ventana de mi solitario cuartucho, para que le pegue un poco de aire a la planta que tengo sobre la ventana con las persianas hechas jirones y escucho los maullidos de las bandas callejeras gatunas emulando frases melódicas de Coltrane…

       Instantáneamente se viene a mi memoria la imagen del gato que leía las partituras y tocaba aquel pianito lustroso de cola.


@giancarlonavesc

miércoles, 2 de mayo de 2012



Dos Partículas                 

No es karma, solo causa y efectoJuan Carlos Navarro



<<La Causa>>


Hidrógeno… es lo que más abunda en nuestro Universo, creador de vida… Una estrella aprovecha el Hidrógeno… Fusión Nuclear, combustión, procesos complejos de la naturaleza, mutación, cambio para bien;  de Hidrógeno a Helio; física cuántica, la ciencia de lo infinitamente microscópico, combustión: a la única certeza que nos lleva es a que desde que nacemos estamos en el proceso de finalizar, así como, la vida explota desde el alumbramiento y se va consumiendo de apoco, una estrella consume sus días a medida de que consume el Hidrogeno que transforma en Helio…


Se cierra la llave de paso gradualmente, el gran calefactor trastabilla peleando por seguir quemando a masivas cantidades el hidrógeno, la estrella va muriendo, pasa de tener ese sano color amarillento a un color  rojizo, una enana roja, elementos que a pesar de aparentar una muerte evidente, tienen una ajetreada vida en lo complejo y diminuto de su nano-mundo… Protones y electrones; dos partículas, complementarias y necesarias, la una depende de la otra, radicalmente diferentes, la sal y el azúcar, lo bueno y lo malo del mundo de la física cuántica, a pesar de tener sus evidentes diferencias y de repelerse con odios fundados, entendibles, pero predispuestos por la naturaleza; coexisten, porque su entorno así lo requiere, quieran o no, forman parte de esa estrella moribunda… el catalizador


La Gran Estrella, se comprime dentro de sí, casi inexplicablemente de apoco, las dos partículas que se odian y se repelen, se ven forzadas a estar cada y cada vez más juntas, cercanas, el protón le quiere retirar sus inquietas manos de encima, a él, el electrón a pesar de esa muestra de indiferencia y repulsión, se ve aún forzado a estrechar entres su pequeñitos brazos al cuerpo de ese electrón del que tanto necesita, - los espacios se acortan.


Las estructuras Moleculares de los átomos, van transformándose y adquiriendo nuevas y complejas formas geométricas, mucho más resistentes, densas y de nuevas características. Dentro de toda esa población de partículas, que viven el cataclismo y el colapso de su mundo, su hogar; ya algunas cedieron a la repulsión y lo indeseable del abrazo de la partícula opuesta, algunas partículas, ya están tomadas de la mano, otras están muy pero muy pegadas, otras ya están abrazadas casi al borde del “apretujón” y otras cuantas más desinhibidas, yacen en el suelo con erotismo cuántico fundiéndose poco a poco la una con la otra en caricias moleculares difíciles de describir… pero estos dos no… - ¡Abrázala muchacho, que se acortan los espacios!...


Una estrella ya sin brillo, mucho, pero mucho muy pequeña a comparación de su tamaño original, densidades incomprensibles, toneladas en solo pequeños gramos de su masa; nuestra estrella nos da la cara de la muerte, apática desde el exterior pero con una vida excitante desde sus adentros y en donde se sucede una serie de acontecimientos dignos de explicar; ya casi todas las partículas cedieron al impulso, muchas ya llegaron al clímax y están más que juntas, fundidas; por fin el electrón, -nuestro muchacho que tenía miedo de abrazar a su protón, la toma en un arrebato de deseo, la partícula opuesta cede al abrazo que este le ofrece, y no por complacencia si no porque son los últimos en fundirse en ese desesperado abrazo, ya no hay espacios para estar separados… antes de que colapsara la estrella y cuando toda la vida era felicidad y nada más que eso, esta partícula, (el protón) le había dicho al neutrón, -“nunca te abrazaría ¿Qué te pasa?... ni aunque fueras el ultimo electrón del mundo” << Vaya vueltas que da la vida>>… -¡Suertudote muchacho! , por fin se te hizo abrazarla…


Mientras el protón tiene un gesto de desagrado y el electrón tiene una sonrisa de oreja a oreja, contradictoria a los hechos catastróficos que se están dando, pasa lo que tiene que pasar… <<no sean mal pensados, estamos hablando de mecánica cuántica de forma muy peculiar>>… Ambas partículas se fusionan en una misma, la sal y la azúcar, forman un nuevo sabor, lo malo y lo bueno forman algo más ecléctico, nivelado, algo nuevo, la suma de dos particular complementarias forman una nueva, se funden en ese abrazo forzado y conciben  … el Neutrón… el equilibrio catastrófico


El espacio tiempo se deforma… análogamente como cuando una malla de seguridad recibe al trapecista que se cae de la cuerda floja por una mala ejecución; este es claro efecto del la nueva partícula…


Estrella de Neutrones… simplemente algo muy complejo y hermoso en el mundo de la astro-física, el telar espacio-tiempo es incapaz de soportar la densidad de tal cuerpo que a pesar de ser diminuto tiene las suficientes agallas para deformar, lo indeformable… Colapso inevitable, nuestra estrella de neutrones se comprime cada vez más y más hasta punto de llegar a ser un cuerpo infinitamente pequeño e infinitamente denso, LA PARTICULARIDAD…


El telar no soporta y se deforma hasta casi los límites de la ruptura pero sin romperse, se precipita formando un agujero negro… el mítico devorador  cósmico, pero hasta las bestias más temerosas tienen algún encanto… vorazmente empieza a engullir, todo lo que se le atraviesa, las teorías dicen que nada puede escapar de uno de estos monstruos ni la propia luz… aunque las leyes de la termodinámica contradicen este punto, con su famosa segunda ley… La entropía: todo cuerpo que provoca una resistencia al movimiento, genera energía calorífica, aun en el inevitable deceso se provoca energía… <<ENTROPIA FUE LO QUE SENTI>>


<<El efecto>>


Mientras el agujero negro, devoraba materia a diestra y siniestra… todo el universo se estaba yendo a la coladera como cuando le bajas la cadena al WC… ¡Flushh! Al excusado… se acercaba el fin del universo, un agujero negro súper masivo, se lo comía, no había escapatoria, <<ni eso de irme Yucatán me salvaría esta vez>>, cada vez más, se sentía la presencia de este monstruo, como en una aspiradora el polvo insignificante estaba siendo tragado… Horizonte de eventualidades, es aquí en donde suceden cosas de verdad extrañas, a pesar de ser un asiduo fanático de Einstein, esta vez lo odiaba, porque según lo que yo había leído, se venía lo peor y no se equivocaba <<¡Claro es Einstein!>>. El tiempo se alenta cada vez más hasta detenerse, el cuerpo se descompone, partícula a partícula, desgarrándose con dolor indescriptible, puedes ver y sentir como esas fuerzas extremadamente intensas te desintegran, dolor indescriptible; es ahí donde sentí la entropía… Mientras moría engullido por ese agujero negro, sentí ese doloroso calor, pero no por la muerte, sino por la bofetada que me despertó de ese extraño sueño.

Ya despierto, confuso y sobresaltado, le pregunto a Judith con confusión: -¿Por qué me pegaste? <<Sobándome la mejilla entrópicamente caliente y colorada>>... ella con la risa que casi no te deja hablar, me responde: -¿Pues qué pasa contigo?... vienes hablando dormido cosas muy extrañas y recuerda que venimos viajando en un autobús, es media noche; también se que los asientos son incómodos y es casi imposible encontrar manera de descansar, pero no por eso hay necesidad de abrazarme tan fuerte… estas loco!… ¿QUE SOÑABAS?...



-Nada… soñé que éramos dos partículas.


@giancarlonavesc